Los discípulos participan en la misión con Dios en todas las áreas de la vida, pueden compartir el evangelio y discipular a los nuevos creyentes.

(Génesis 3:15; 12:3; Mateo 9:10–13; 28:19–20; Marcos 16:15–16; Lucas 4:17–21; Hechos 1:8; 2:42–47; 20:24; 2 Corintios 5:16–21; Filipenses 2:12–16; 2 Timoteo 2:2)

PREESCOLARES

• Creer que Dios ama a todos y los creó de manera única.
• Saber que Dios tiene un plan para cada uno.
• Saber que Jesús ha hecho posible que vivamos en el cielo algún día.

NIÑOS PRIMARIA

• Los discípulos saben que Dios diseñó de manera única a cada persona y tiene un plan para ellas, y buscan apoyar las misiones a nivel local y global.
• Los discípulos dicen sí a la instrucción de Dios de compartir su fe, descubrir su propósito y cuidar a los demás. Desarrollan una conciencia, amor y aprecio por todas las personas.
• Los discípulos entienden que Jesús es el único camino al cielo. (No pueden llegar al cielo solo por ser buenos). Aprenden acerca de la misión, el propósito y los planes de Dios, que incluye la identidad y los dones de cada uno.
• Los discípulos buscan oportunidades para orar, dar e ir para que otros en su comunidad y en el mundo conozcan a Jesús. Entienden que Dios puede llamarlos a servir como ministros o misioneros.

JÓVENES

• Los discípulos comienzan a desarrollar una urgencia divina para compartir el Evangelio con familiares y amigos y guiar a alguien a la fe en Cristo. Apoyan con fervor y dedicación la actividad misionera local y global.
• Los discípulos comparten valientemente su historia de fe personal y las buenas nuevas de salvación con amigos y familiares para hacer discípulos de todas las clases sociales, etnias y culturas.
• Los discípulos continúan profundizando su comprensión de la misión, los propósitos y los planes de Dios, que incluyen su identidad, sus dones y habilidades únicas, y el sacrificio personal.
• Los discípulos buscan oportunidades para orar, dar e ir para que otros en su comunidad y en el mundo conozcan a Jesús.
• Los discípulos entienden que su trabajo diario es una ocupación divina para avanzar en el reino de Dios, y siempre están abiertos a un llamado específico a nuevos lugares de servicio.

ADULTOS

• Los discípulos tienen una urgencia divina de compartir el evangelio sabiamente con los demás y guiar a alguien a la fe en Cristo. Apoyan fervientemente la obra misionera local y global.
• Los discípulos disfrutan de la comunión en la iglesia local e invitan a otros a formar parte de su comunidad que acoge a todas las clases sociales, etnias y culturas.
• Los discípulos participan en la misión de Dios, comparten un sentido de propósito con otros creyentes y se apoyan mutuamente en su llamado individual.
• Los discípulos conectan el evangelio con la búsqueda del bien común para sus comunidades, orando y trabajando por la prosperidad espiritual y social.
• Los discípulos ven su trabajo diario como una ubicación divina para avanzar en el reino de Dios, y siempre están abiertos a un llamado específico a nuevos lugares de servicio.

Descargue la Guía de resultados del discipulado (PDF)